¿Eres de los que siempre ha querido llevar las patillas largas? ¿Prefieres degradarlas para un look más audaz? Sea cual sea tu estilo deseado, necesitarás aprender a recortar, perfilar y cuidar la barba y el vello facial. Todos los caminos conducen a Roma, pero cuando hablamos de patillas, ¡no hay atajos!
Aprender a arreglar las patillas añadirá un toque de clase a tu apariencia. Así que, ¡manos a la obra! Descubre todo en esta guía de Braun, desde qué tipos de patillas hay y cómo recortarlas hasta qué necesitas hacer para mantenerlas a punto.
Importancia de arreglarse las patillas
Si quieres equilibrar tus rasgos faciales y crear un marco supera tractivo para tu rostro, aprender a recortar y arreglar tus patillas debería ser una prioridad (al menos para tu rutina de aseo personal). Llevar las patillas lustrosas y bien cuidadas, independientemente del largo, puede ayudarte a definir la mandíbula, realzar la línea frontal del pelo y reducir o rellenar tus mejillas.
Tipos de patillas
Clásicas:
Las patillas clásicas llegan hasta la mitad de las orejas y se mantienen bien recortadas para que luzcan limpias, pobladas y prolijas.
Cortas:
Las patillas cortas no llegan tan lejos. Más bien se detienen un poco más arriba del punto medio de las orejas.
Largas:
Ya el nombre nos da una pista… Las patillas largas crecen más allá de la mitad de las orejas.
Degradadas:
Estas patillas se cortan gradualmente comenzando por la medida más larga. La idea es que, en algún punto, el vello se reduzca tanto que termine camuflándose con la piel.
Conectadas:
Las patillas conectadas crecen hasta la línea de la mandíbula para después unirse con la barba o bigote.
Cómo elegir la longitud adecuada para las patillas
Las patillas pueden ser tus aliadas para verte guapo en todo momento. De hecho, representan un estilo que le queda bien a casi todos los hombres, a excepción de los calvos. Pero, si quieres sacarles el máximo provecho, no basta con saber eso: necesitas elegir la forma y el largo que más le favorezca a tu rostro.
Si tienes la cara cuadrada, prueba llevando unas patillas largas. Su longitud te ayudará a estrechar la mandíbula para conseguir un aspecto más cincelado. Las patillas largas también combinan con los rostros redondos, ya que definen sus rasgos faciales creando un ángulo más marcado.
Para las caras ovaladas, alargadas o en forma de diamante, no valen las patillas largas. Mejor apuesta por una longitud media.
El truco para que se vean pulidas es la prueba del dedo: mírate en un espejo y pon tu dedo índice justo debajo de cada patilla. Fíjate en la altura de los dedos para ver si están alineadas o necesitas nivelarlas.
Guía paso a paso para recortar las patillas
1. Comienza por lavar y secar tu vello facial muy bien. Una vez seco, cepíllalo para hacerle un buen degradado, afeitarlo o recortarlo (según el estilo que más te mole).
2. Deshazte el vello que sobra con tu recortadora de barba. Utiliza el peine o ajuste más largo para domar los pelos rebeldes y darles forma a las patillas. La anchura de las patillas dependerá de tus gustos, pero si no sabes por dónde comenzar, puedes tomar la de tus orejas como referencia. Estrecha las patillas gradualmente hasta llegar a la punta para conseguir un aspecto más natural y equilibrado.
3. Programa la recortadora en el segundo nivel más corto y pásala hacia las patillas. Este simple paso te ayudará a limpiarlas y definirlas. Si quieres, puedes difuminar el vello con la medida más baja. Asegúrate de pasar la recortadora inclinada para crear un buen degradado. ¿Necesitas una herramienta eficaz que te facilite el trabajo? Entonces, echa un vistazo a la recortadora de precisión Braun, que viene con distintas medidas para que puedas recrear varios estilos de patillas en casa.
4. Repite el proceso hasta que tus patillas tengan la forma y el largo deseado.
Cómo mantener las patillas
Recorta las patillas con una recortadora cada 3-5 días. Esta es la mejor manera de mantenerlas definidas. Para mejores resultados, guíate por el ritmo de crecimiento de tu vello facial.
¡No dejes de retocar tus patillas por mucho tiempo! Este es un estilo que necesita mantenimiento.
Incluye el lavado del vello facial en tu rutina de cuidado de la barba para estar siempre impecable.
Cuando termines, aplica un aceite para la barba o algún bálsamo que hidrate el vello y la piel.
Cepilla o peina el vello facial para mantenerlo limpio, ordenado y libre de nudos.